LA RUTA AZUL
Mi niña eres tú.
Y no supe verte
hasta hoy
en que tus ojos
me confesaron
tu sed de Dios.
Hija mía,
que llegaste
desde astros lejanos,
a cumplir tu misión.
Desde la nueva luz
te asomas,
y me señalas
la ruta azul
que hemos de cruzar
juntas con valor.
INGRID ZETTERBERG
Dedicado a mi amada
hija Natalie
De mi poemario
"Los girasoles eternos"
Derechos reservados
Safe Creative Cta. 1006080193112
Sentido e belo poema
ResponderBorrarBeijinhos
Gracias Maria por recorrer mis versos y apreciarlos. Un abrazo.
ResponderBorrarQue bella es tu sensibilidad amiga. Hermoso poema. Saludos y abrazo.
ResponderBorrarGracias amiga Sandra por asomarte a mis versos y dejarme tan bella respuesta. Un abrazo.
BorrarLos hijos suelen sacar lo mejor de nosotros Ingrid, suelen ser nuestra inspiración y nuestra vida. lo has reflejado perfectamente.
ResponderBorrarSaludos Cordiales
Gracias José Antonio por visitar mis versos y dejarme tan bonito comentario que comprendo y aprecio. Un saludo.
ResponderBorrarHola Ingrid. Admiro esa iluminación que tienes de sensibilidad cuando leo un nuevo poema tuyo. Es muy bonito.
ResponderBorrarFeliz fin de semana, guapa.
Gracias querida amiga Mónica por estar presente entre mis versos y dejarme tan bella respuesta que aprecio mucho. Un abrazo desde mi corazón.
ResponderBorrarQue hermosura, muy querida amiga Ingrid.
ResponderBorrarTienes un hermoso corazón y una pluma privilegiada.
Abrazos!!
Gracias querido amigo Ricardo por estar presente entre mis versos y dejarme tan linda respuesta que aprecio bastante. Un abrazo.
ResponderBorrarTu poema esta lleno de luz, tus letras dedicdas a tu hija son preciosas!!! Besos
ResponderBorrarGracias amiga Hanna por estar presente entre mis versos y dejarme tan bello comentario. Un abrazo grande.
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