NACER EN SU MIRADA
No quiero nada sin él, sólo quiero
extinguirme a su lado.
Anhelo sus canas onduladas
para mi pecho angustiado.
Deseo la tristeza de mis ojos,
junto al nudo de su garganta.
Sólo su vida para mi vida.
A los dieciocho años yo nací.
Una tarde santiaguina de invierno
yo aprendí a vivir en sus ojos;
y se hizo necesario para mis oídos,
su acento, su voz queda, sureña.
Mi mitad absoluta;
hacia él corre mi alma,
sedienta de sus deseos.
Mis manos lo esperan, para espantar
las sombras de su amada frente.
Tras el bálsamo de sus lágrimas,
está la serena luz que aguarda
en sus miradas,
para ahuyentarme las tinieblas
de su ausencia.
Hermoso Ingrid!!!!
ResponderBorrarBesazo y feliz semana.
Gracias Paula por asomarte a mis versos y dejarme tan linda respuesta. Un abrazo.
ResponderBorrarQue hermoso amiga, lleno de amor este poema. Saludos y abrazo.
ResponderBorrarGracias amiga Sandra por asomarte a mis versos y dejarme tan bonito comentario. Un abrazo.
BorrarApaixonado, profundo e belo poema.
ResponderBorrarBeijinhos
Gracias Maria por visitar mis versos y dejarme tan linda respuesta. Un abrazo.
ResponderBorrarCisnes, amor y rosas, cuanta preciosidad! mas romantico no se puede, y me fascina como decoraste este blog con un Camilo jovencito y fabuloso y una Ingrid deslumbrante, mas radiante que los Alpes. ೋღ 🌺 ღೋ
ResponderBorrar¡Qué linda tu respuesta, amiga Carolina! eres muy poética para comentar y me alegras el corazón. Gracias por estar presente entre mis versos. Un besito.
BorrarHola Ingrid.
ResponderBorrarMe he emocionado leyéndote. La persona que tengo a mi lado y tu poema me ha sensibilizado.
Que bonito cuando existe tanto amor.
Un enorme abrazo.
Buena semana,amiga.
¡Qué hermoso tu comentario amiga Mónica! eres romántica, y tus palabras lo demuestran, también creo que estás enamorada, ¡qué bonito! Mil gracias por visitar mis versos. Un abrazo grande.
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